martes, 28 de enero de 2014

Promesas de la toma de posesion de Juan Orlando Hernandez

Tambores, platillos y un gran desfile fue como se iniciaba la toma de posesion del nuevo presidente de Honduras, Juan Orlando Hernandez. Aí iniciaba su mandato, un nuevo gobierno lleno expectativa y la mirada de la oposicion puesta en él.

Imaginabamos un estadio lleno, pero no, no fue asi; lo que no sabemos es que si las personas no quisieron ir, negandole así su apoya al nuevo mandatario, o fueron las excesivas medidas de seguridad lo que impedia la llegada de la gente, desde una inmensa fila, un aparato para leer un codigo de barra de los carnet de los periodistas, hasta una inspeccion minuciosa de ellos era parte del protocolo que cada periodista pasaba para poder entrar.

Sin duda el lugar se encontraba impecable, se habia cumplido con el objetivo, un lugar que con un escenario adornado con una mesa de vidrio y base de tronco de manera que mostraba la elegancia y sobre todo el costo del evento.

Uno de los momentos emotivos del evento fue el canto de la niña de Lempira, que con su pequeña voz, su encanto, sonrisa e inocencia conmovia el corazon de todos, ella representaba no solo su pueblo, si no también a la niñez del país; con su canto mostraba la esperanza de los niños, sensibilizo a todos, tanto que al empezar su canto el presidente saco de su bolsillo un pañuelo y seco su rostro, imaginamos todos que la niña lo conmovio tanto que al empezar cantar saco las lagrimas del mandatario.

El discurso del presidente no tuvo nada de anormal, fue como el de siempre, un enlistado de los problemas del país, y las medidas que su gobierno tomara. Como lo hacen todos los presidentes.

Una de las partes que más llamo la atencián en su discurso fue su frase "se les acabo la fiesta a los delincuentes"  la cual exponia que iba a combatir el narcotrafico, el crimen organizado y el lavado de activos, y asi daba señal de como seria su gobierno al repetir la frase del expresidente Ricardo Maduro "cero tolerancia"

Además en su discurso lleno de esperanza a miles de hondureños, al prometer que su gobierno generará 100.000 empleos. Y asi siguieron varias promesas, seguridad, salud, educación. Asi termino su discurso como los demás lleno de ilusiones y promesas para el pueblo, subio a un jeep acompañado por el jefe del estado mayor de las fuerzas armadas, el general Freddy Diaz. Así comenzaba su mandato.